Lluvia vs Piña de Daniel
Por Rafae Daniel
Fuertes precipitaciones vespertinas antecedieron a La Piña de Daniel en la jornada sabatina y posteriormente una pertinaz llovizna al comienzo de la noche, auguraba un descalabro en la realización de la tertulia.
Hasta más allá de las ocho las calles aún estaban bastante desoladas, sólo uno que otro “guapo” o “guapa” con sombrilla o capa, mantenían las esperanzas del arreglo atmosférico de la noche.
Cuando llegamos al Patio de la Poesía de la UNEAC, nada más estaban presente el operador de audio, el barman, el guardia nocturno y por supuesto, yo, como anfitrión..
Al poco rato llegaron los músicos y me dieron la mala noticia de que Ernesto Valdés, el locutor, se encontraba enfermo.
Poco a poco se fueron sumando asiduos a la peña: Irene Brizuela y su esposo Bismarck, Puchi Serrano y su pareja, hija del trovador Pablo Rodríguez; el Doctor Ricardo Isidrón y su esposa, entre otros y me dije: “Bueno ya la asistencia está garantizada”
LA PIÑA
Lo que más me dolía era suspender la piña por su contenido, pues Julio -así, con mayúscula- es uno de los meses más cargados de fechas y acontecimientos de alta intensidad histórica.
Al fin el programa arrancó como siempre, con la identificación de Radio Sancti Spíritus y de Centrovisión y comenzamos a detallar la primera efeméride del día: el nacimiento del Mayor General Serafín Sánchez Valdivia y de inmediato el polifacético cantante Ángel Alonso interpretó una canción dedicada al prócer.
No pasó por alto el Aniversario 50 del Trío De Gómez, ni el 30 del programa radial Cómo lo Oyes, de Radio Sancti Spíritus y se recordó al fallecido Ramón San Pedro, primer locutor del espacio y a María Josefa Jiménez, jubilada y su primera conductora y hasta a Zenaida Chachi Valdés, su inicial directora.
Entre poemas y canciones transcurrió la Piña, rememorando fechas como el desembarco de Serafín por la ensenada de Tayabacoa, el nacimiento en Cuba de El Cucalambé y en Ecuador de Guayasamín o el asesinato de la Famila Romero por bandas contrarrevolucionarias en el Escambray y el de Frank País en las calles santiagueras por las hordas batistianas.
Y, por supuesto, no faltó en este recordatorio de Julio los asaltos a los cuarteles Moncada, de Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes, de Bayamo, como acontecimientos centrales por su connotación en la historia, al significar el inicio de la última etapa de lucha del pueblo cubano.
Los cantantes Angel Alonso y Raúl Palmero hicieron de las suyas a través de su depurada calidad interpretativa y el Trío Colonial demostró la inmortalidad de la trova con novedosas canciones del genero, en su mayoría, del director Machy Méndez.
Los asistentes actuaron como protagonistas y así ocuparon lugar en el escenario del Patio de la Poesía Aurelio, con sus boleros morunos e Ismael con su fuertes balada al estilo de la “Década Maravillosa”.
La profesora Irene Brizuela expuso sus pinceladas filosóficas, con prominente intercambio con los presentes y su esposo. el arquitecto Bismarck intercambio sobre sus amplios conocimientos de la historia.
Como climax de la actividad los asistentes, de pie, cantaron a coro, junto al elenco artístico Pensamiento, la emblemática canción espirituana del pródigo compositor de la villa Rafael Gómez, “Teofilito”.
Al término de la tertulia estaban ocupados una buena parte de los espacios del Patio de la Poesía de la UNEAC por lo que en el match frente a la lluvia salió victoriosa la Piña, por decisión unánime.
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