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Sin comparación la realidad cubana con la de Puerto Rico tras el paso de los huracanes

Sin comparación la realidad cubana con la de Puerto Rico tras el paso de los huracanes

Consejo de Defensa de Sancti Spíritus analizando la marcha de las tareas de recuperación 

Por Rafael Daniel

Nos conmocionamos cuando apreciamos en los medios internacionales la trágica situación en que se encuentran las hermanas naciones del Caribe debido  al paso de destructores huracanes como “Irma” y “María” y en algunos, como Puerto Rico, ni siquiera cuentan con las esperanzas que debiera ser su principal asidero espiritual.

En la denominada Isla del Encanto, no se pueden ni leer este material virtual porque sólo el 15 por ciento de la población cuenta con electricidad y tampoco disponen de otros elementos vitales  como alimentos  ni agua potable ¡Y qué decir de las recobrar las casas de miles y miles de personas sin hogares.

Mientras, Trump, en su abierta campaña xenofóbica se burla de los hermanos borinqueños y ni él ni su gobierno resuelven nada, acá, en la vilipendiada y revolucionaria ínsula cubana los imponentes perjuicios ocasionados por el ciclón reciben  positiva respuesta.

El huracán Irma azotó despiadadamente al entorno norte del caimán, con descomunal fuerza nunca vista y ocasionando inusuales daños a casi todo el país por la estrechez de nuestra geografía y observamos como los perjuicios también se sintieron al centro y al sur del archipiélago.

A los pocos días de pasar el potente ciclón ya estaba restablecido el servicio eléctrico en casi todo el país, incluyendo Yaguajay, la zona más afectada, al igual que las comunicaciones de telefonía celular y fija.

Desde entonces, cada noche allí se reúne el Consejo de Defensa Provincial para indagar con lujo de detalles como se comporta la recuperación de ese municipio y de la provincia.

La cultura del detalle caracteriza a estos encuentros en el que participan todas las principales autoridades del territorio espirituano, encabezadas por el Partido y el Gobierno, en la que el primer secretario del Partido deviene como Presidente del Consejo de defensa y la presidenta de la Asamblea Provincial del Poder Popular como vicepresidente del Consejo.

Los periodistas que asistimos asiduamente a estos encuentros a veces no somos capaces de aquilatar su envergadura, sin embargo, cuando se informan los pasos de avances, reflexionamos y nos damos cuenta de la importancia de vivir en un país como el nuestro.

En el último encuentro al que asistí el presidente del Consejo de Defensa José Ramón Monteagudo, al darse cuenta de la pifia de alguien le recriminó a todos y les advirtió que no se tratan de acciones similares a periodos normales sino que había que imprimirle el triple de la fuerza.

En un momento de la reunión mostró su desacuerdo por la falta de atención a una “tendedera” al norte de Yaguajay y precisó que era inaudito que eso ocurriera en pleno período de recuperación. (Una  tendedera es un cable que, generalmente, de manera ilegal, se tiende desde un inmueble legal a otro al que no le llega la electricidad)

Gracias a ese concepto generalizado vemos como se restauran infinidad de viales, se limpian y se botan escombros de las comunidades, se erigen albergues para los damnificados sin techos, otros, felices, retornan a sus hogares restaurados.

Los niños asisten a  sus respectivas escuelas, la mayoría de los centros de salud brindan los servicios normales, al igual que los culturales y deportivos.

No todo es color de rosa. Falta mucho por hacer, pero que diferente la tranquilidad ciudadana de quiénes sí tienen confianza y fe en este calumniado sistema y en sus autoridades.

Y muchos no se asombren si decimos que no se habla una palabra de bloqueo, sino de seguir hacia adelante con nuestros limitados recursos, confiados en el futuro y sin ninguna esperanza perdida como le ocurre al pueblo borinqueño que sólo obtuvo la burla de un desnaturalizado y abominable presidente que no permitió la ayuda ofrecida por el pueblo cubano para compartir lo que tiene, como lo hacemos con Dominica o  México y en decenas de otros países del mundo.

Qué diría ahora el gran Gautier de su Tierra del Edén a la que llamó la Perla de los Mares. Cuánto darían los habitantes de Puerto Rico por tener un Consejo de Defensa como el nuestro y prescindir de la burlesca y abominable imagen del despiadado emperador Trump.

 

 

 

 

 

 

 


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